28 mayo 2004

La Iliada, de Homero

En el canto IX, es para subrayar y citar todo el parlamento de Fénix a Aquiles. Fénix fue su tutor desde que salieron de casa para la guerra, y le dice frases que son como para regalarlas el día del padre o de la madre. Tendría que buscarlas, pero lo mejor que recuerdo es cuando dice algo así como:
- ¿Te acuerdas, Aquiles, la de veces que me has manchado el pecho de la túnica cuando te daba de comer, y tú echabas la papilla?

Eso sí, por lo que dice los potitos de entonces eran, como las "sopas de cabalo cansado", a base de vino. Así de hombres salían los aqueos de hermosas grebas.

Por cierto, ¿qué son las grebas? Veamos qué dice google:
greba.
(Del fr. ant. grève).
1. f. Pieza de la armadura antigua, que cubría la pierna desde la rodilla hasta la garganta del pie. (Es decir, la parte delantera de la pantorrilla. Según el diccionario, la pantorrilla es la parte carnosa debajo de la corva. Y la corva es la parte de atrás de la rodilla. ¿No tiene nombre propio esa parte de la pierna? Según el diccionario, eso sería la "canilla" de la pierna, o "espinilla".)

Además, hay quien las vende, para los argivos de hoy en día: http://www.xyfos.com/product_info.php/products_id/654/name/Grebas+Articuladas

Hay varias palabrejas más de las que no sabía el significado hasta leer este libro. ¿Qué es la égida?
égida.
(Del lat. aegis, -ĭdis, y este del gr. αἰγίς, -ίδος, escudo o coraza de piel de cabra).
1. f. Piel de la cabra Amaltea, adornada con la cabeza de Medusa, que es atributo con que se representa a Zeus y a Atenea.
Además, por la función protectora (más mágica o divina que física, creo) que representaba para estos dos dioses, tiene otros dos significados en el diccionario: escudo, y defensa.

Tarde de cómic

De la biblioteca:
- Contrato con Dios: Aún no lo he acabado, pero va para impresionante.

- La isla de las voces

Comprado y leido:
- Bone, por fin los número 36 y 37 que cierran el "primer arco argumental". Es la primera serie de cómic que compro en mi vida, y no tenía ni idea de una tal cosa como los arcos argumentales.
La verdad es que he acabado comprando y leyendo Bone por puro orgullo, porque no podía dejarlo sin terminar. Pero mis primeras expectativas se han quedado sin cubrir: el humor, no me llega demasiado. Del último número, solo una buena broma, que me haya hecho sonreir, cuando aparece la princesa ataviada para la guerra y Phoney le dice: "¿Puedo yo pintarme la cara también?". Es un cachondo, el primo alto de los Bone. Las mostrorratas suelen estar bastante bien, también.

Pero lo que menos me llega de la serie es el amor, la aventura y el terror. El gran león (Jack, o como se llame) ha resultado ser un memo, con unas persecuciones de lo más aburrido y repetitivo (¿cuántas van? por lo menos tres o cuatro). El amor entre Phone y la princesa, parece que ha desaparecido, y es una pena, me gustaba y hacía gracia. La aventura y el terror del Señor de las Langostas, ha resultado ser un bluff, y podría no serlo: por ejemplo: ¿a qué se descubre la cara Briar en cuanto llega Rose? Es mucho más apabullante esa capa sobre los ojos. Aunque, la verdad, cuando uno descubre que no es solo ella, sino toda una orden de comemaderas los que van así, pasa a dar menos miedo el susodicho. De mucho miedo es lo de que Briar estuviera rellena de langostas, buen punto argumental: pero aquí el dibujo de Jeff se queda simplon: más tinta, más negro, algo más apabullante, habría sido de agradecer.

Seguiré el consejo del editor, y me leeré toda la historia del tirón, a ver si cambia mi impresión, o es como pienso, una historia y un dibujo que han ido flojeando según avanzaban.

Lo peor, que han subido el precio sin avisar: tanto correo, tanto rollo al principio y al final de cada número presumiendo de honradez y comunicación con el lector, y luego suben el precio de rondón. ¡Casi me cobran el precio aumentado en el número 36, que aún era de 1.70€!

27 mayo 2004

Como extranjero en patria ajena, de Robert Heinlein

Aquí irá lo que tenga que decir de este libro

El de Heinlein es un viejo amigo, comprado hace mucho y nunca terminado. De vez en cuando sale de la mesilla de noche, y le doy un tiento. Sospecho que la versión que tengo es mucho menos interesante de lo que debiera ser, por culpa de la traducción y de la censura. Sí, resulta que ahora me he enterado que es la primera edición española, de cuando aún había censura. Aunque en el libro hablan del sexo libre sin parar, por lo visto la censura metió la tijera bastante. No sé si solo quitaron escenas fuertes, o además se cargaron parte del argumento. Habría que enterarse en es.rec.ficcion.misc

Leyendo mientras empiezo:

La Iliada, de Homero
Guía de curas con encanto, de José Luis Olaizola

Empezados y parados:
Como extranjero en patria ajena, de Heilein
Ada o el ardor, de Vladimir Nabokov
El código Da Vinci, de nosequé Brown
El último Catón, de Matilde Asensi

Estos dos últimos, parados por aburriiiiidos y pretenciosos. El de Nabokov no les va a la zaga en lo de pretencioso, pero por lo menos es más interesante, a ratos. Además, es un libro bookcrosser, así que mi obligación es leérmelo.
El de Heinlein es un viejo amigo, comprado hace mucho y nunca terminado. De vez en cuando sale de la mesilla de noche, y le doy un tiento. Sospecho que la versión que tengo es mucho menos interesante de lo que debiera ser, por culpa de la traducción y de la censura. Sí, resulta que ahora me he enterado que es la primera edición española, de cuando aún había censura. Aunque en el libro hablan del sexo libre sin parar, por lo visto la censura metió la tijera bastante. No sé si solo quitaron escenas fuertes, o además se cargaron parte del argumento. Habría que enterarse en es.rec.ficcion.misc

Por empezar:
Mono y esencia, de Aldous Huxley

Recién terminados:
La barraca, de Vicente Blasco Ibáñez